Aprovechando el clima y la nieve, me escapé a Puebla. Si estás en la Ciudad de México puedes ir y venir aunque Puebla es tan pero tan chula que te recomiendo quedarte un par de días.
Acá lo que NO puedes dejar de hacer:
1. Camina por el Callejón del Sapo y enamórate de las antigüedades que venden: muebles, lámparas y pura cosa chula. (Psst: de camino, cerca de la jardinera, encontrarás una placa dedicada a John Lennon)
2. Los fuertes de Loreto y Guadalupe son un must, además de ser el escenario de la batalla del 5 de mayo, ofrecen una vista chulísima de la ciudad.
3. Come enchiladas de mole. De nada.
4. El Museo Casa de los Serdán está recién remodelado y les quedó muy chulo: es una casona del siglo XIX cuya fachada todavía mantiene los hoyos de las balas de la Revolución Mexicana.
5. La cocina virreinal del Ex Convento Santa Rosa. Chula, chula, chula.
6. Si eres fan, como yo, de los azulejos de Talavera, no dejes de observar la fachada de la Casa de los Muñecos.
7. Date una vuelta por el Centro Cultural Poblano, casi siempre hay eventos o exposiciones chulas además de que el edificio es chulísimo.
8. La glorieta de la China Poblana.
9. Tómate una copa de vino o una chela bien fría en la terraza del hotel La Purificadora mientras disfrutas del atardecer con vista a la iglesia de San Francisco.
10. ¿Mencioné comer mole?